۞CaritasOscuras..

En la oscura habitación risitas se escuchan bajo la cama, dos pequeñas caritas brillan entre las sombras, escondiéndose quietesitos entre ratas y cucarachas, un poco empolvados cierran fuertemente sus ojos para no ver mas y no ser descubiertos, los hermanitos tomados de la mano esperan aterrados a que su horrenda y despiadada nana no los encuentre, esa niñera de traje negro, botones y cuello blanco, zapatillas altas y nariz de bruja. Están muy asustados, pues cuando dormía en el sofá frente ala televisión, quitaron su desgreñada peluca que cubría su pecosa calva. Los pobres niños entre suspiros cortados y unas vagas risas se ocultan uno junto al otro, son apenas las ocho en punto y el reloj a tocado en la vieja sala, es la hora en que sus padres llegan, en el elegante carro que tanto les gusta ver.
Pero la fea niñera de un salto, se a despertado, los a oído y los esta buscando por toda la casa, frente a un espejo se ha visto y con un grito de su negra boca se ha dado cuenta de la travesura de los niños. Subiendo rápidamente por la escalera, maldiciendo y gritando llena de cólera, abre violentamente la puerta del cuarto de donde se esconden los pequeños, ahora si a de castigar severamente lo que han hecho. Mientras ellos se siguen ocultando bajo la cama escuchando como las horribles zapatillas dan unos fuertes pasos muy cerca de ellos, solo se quedan muy quitesitos.
-Salgan ya- Dice la mujer con voz ronca y fuerte, mientras se dirige a revisar el baño de la habitación. Los pobres niños solo muerden sus labios y rezan en silencio para que no los encuentre, enfurecida la niñera sale caminando apresuradamente revolviéndolo todo, rechinando sus amarillentos dientes con enojo al no poder encontrarlos, sin moverse los dos hermanitos se encuentran todavía bajo la cama, el polvo es mucho y uno de ellos estornuda, eso basta para que la fea niñera se de cuenta que están debajo de la cama, su cara enferma y vieja despide una irónica sonrisa, se le pueden ver las arrugas colgando de su rostro complacido, al fin los a encontrado, nada se puede hacer, todo acabo par ellos. Los saca tomándolos de los brazos, arrastrándolos..
Realmente sus padres nunca llegaran, han muerto hace dos meses, han quedado a cargo de su vieja tía, de amargada y enferma alma, el único familiar que ahora tienen.
En la mañana despiertan en la misma habitación con golpes y moretones por todo sus cuerpos, condenados un día mas en la amarga prisión de su vida, solo queda un pequeño rayito de consolación en una pequeña foto de mamà, que guarda la niña en algún roto bolsillo de su vestidito, que les da un respiro cuando mas se sienten ahogados, y una sonrisita entre la tristeza alegra de nuevo sus vidas.